Las comedias de Plauto comenzaron a representarse en Roma a partir del 210 a.C. en medio de un gran éxito de público, hecho que se tradujo, tras su muerte, en una abundante circulación de sus obras. Son más de 130 las comedias atribuidas a Plauto, aunque el crítico Varrón, en el siglo I a.C., consideró que sólo 21 eran auténticas, las mismas que han llegado hasta hoy. Plauto se dedicó exclusivamente a la comedia, tomando como modelo la nueva comedia griega, que adaptó al gusto romano y que al parecer contrastó con otras obras romanas contemporáneas, mezclando personajes y situaciones. Si bien partía de situaciones completamente convencionales, Plauto supo combinar con gran maestría la acción y el diálogo, pasando con un ritmo vivo de la intriga al retrato de costumbres, y supo imprimir a sus textos una dosis importante de lirismo y fantasía.
Miles Gloriosus, o también El soldado fanfarrón, del dramaturgo Plauto (251 a.C.-184 a.C.), es un referente dentro del teatro clásico y una de las obras más conocidas de su autor. Se trata de una comedia exquisita que, en la versión que presenta Clásicos Contemporáneos, está pensada para ser representada en espacios singulares.
La comedia narra las aventuras de un militar obsesionado por conquistar… ¡mujeres ajenas!…